Qué emocionante y abierto Tour de Francia nos espera. La segunda etapa del Tour de l’Ain, disputada hoy, ha sido un interesante ensayo general para la Grande Boucle. Más allá de la victoria de etapa de Primoz Roglic, son varias las conclusiones que nos deja el día, a la espera de la etapa reina que se disputará mañana. La principal conclusión está clara: el Jumbo-Visma va en serio en su desafío al todopoderoso Ineos en el Tour. Van a por todas y su estructura no tiene nada que envidiar a la del equipo que ha dominado el Tour en los últimos años.
El Jumbo-Visma ha dado una lección de trabajo en equipo, absolutamente impecable. Primero fue Tom Dumoulin quien trabajó para sus compañeros, haciendo la primera selección en la penúltima ascensión del día. Después, cuando el ciclista neerlandés hizo su trabajo, fue el turno de George Bennett, que marcó un ritmo asfixiante que pocos ciclistas pudieron seguir. Entre los que lo lograron no estaban ni Chris Froome, claramente muy lejos de su mejor estado de forma, y Geraint Thomas, que al principio sí pudo resistir delante, pero terminó cediendo. Sólo Jonathan Castroviejo, uno de los mejores gregarios del pelotón, un auténtico lujo, siguió al lado de Bernal.
Quedan aún tres semanas para el comienzo del Tour, un mundo, pero parece claro que el líder indiscutible del Ineos en la ronda gala será Bernal. Parecía lo lógico desde el principio, entre otras razones, porque es el vigente ganador de la carrera, pero las primeras pruebas de Thomas, Bernal y Froome en esta temporada rara están demostrando con nitidez quién es el más fuerte. El Jumbo-Visma tenía todo a su favor y se dedicó a poner en dificultades a Bernal. Primero, con ese trabajo existente de Bennett; después, con un ataque de Steven Kruijswijk, otra de las bazas del equipo, y finalmente, con la aplastante victoria de Roglic en la etapa, tras un incidente de Bauke Mollema con el pedal.
Junto a los tres corredores del Jumbo-Visma y a Bernal, sólo llegaron en el grupo de cabeza Bauke Mollema, Valerio Conti y Nairo Quintana. Eso es todo. Tras su victoria de etapa, Roglic es líder de la general, que defenderá mañana, en la jornada final de la carrera francesa, en la que se revivirá el duelo entre su equipo, una máquina perfectamente engrasada hoy, y el Ineos, que empieza a mostrar síntomas de humanidad y en el que Bernal está dejando bien claro que es su baza más seria para buscar la victoria en el Tour.
Roglic tiene 10 segundos de ventaja con Bernal, 12 segundos con Conti y 18 con Quintana, que mantuvo un perfil bajo y fue a rueda durante toda la etapa, asistiendo como testigo de excepción del duelo entre el Jumbo-Visma y el Ineos, ese duelo que promete grandes emociones en el Tour.
Comentarios