Prometía la tercera etapa de la Volta a la Comunitat Valenciana y no ha decepcionado. La ascensión final al Alto de las Antenas del Maigmó, incluido su tramo de 1,7 kilómetros de sterrato, nos ha ofrecido el primer gran espectáculo de la temporada ciclista. Ha sido un desenlace precioso y lleno de emoción, en el que Aleksandr Vlasov ha ganado la etapa y ha logrado arrebatar del primer puesto de la general a Remco Evenepoel, quien se mostró intratable en la primera etapa, pero que hoy no ha tenido el día. La etapa también ha servido para confirmar el excepcional estado de forma de Carlos Rodríguez, quien a sus 21 años ha sido hoy segundo en la etapa.
Un gran día de ciclismo, que ha tenido su punto culminante en ese exigente tramo de sterrato del que ayer se quejó mucho el Quick Step, creo que sin demasiada razón. No ha sido un tramo de tierra diferente a lo que se ha visto en otras careras, no suponía un riesgo excesivo ni inasumible para los corredores. Ha brindado una batalla emocionante en la que Vlasov ha sido el mejor. Un acierto indudable de la organización. El ciclista ruso, que este año estrena los colores del Bora, atacó a tres kilómetros del final y no logró irse, pero sí sacó de rueda a Evenepoel algo más allá, a un kilómetro y medio de la meta.
Para cuando el grupo de los favoritos llegó a ese esperado tramo de sterrato, ya había sido neutralizado Tratnik, el más fuerte de los ciclistas de la escapada inicial, en la que también estaban Barceló, Bystrom, Claeys, Molly, Navarro, el menor de los hermanos Paret-Peintre, Polanc, Prodhomme, Valter y Van den Berg. El Quick Step de Evenepoel venía haciendo la marcha en el pelotón, hasta que, a medida que se acercaba el desenlace, el Movistar, el Bora y el Ineos endurecieron sucesivamente la carrera, anticipando así la batalla que se avecinaba.
A cinco kilómetros del final atacó Valverde y después lo probó Soler. Ambos trabajaban para sus líderes, Valverde para Mas y Soler para Ayuso. Este último, que corría en casa, lo ha intentado pero no ha logrado estar entre los mejores en la subida final. Cuando llegó el sterrato Fuglsang demostró su pasado en el ciclismo de montaña y aceleró la marcha. Tras él se fueron Evenepoel, Vlasov, Mas y Valverde. Pronto se repuso un inmenso Carlos Rodríguez, que entró en meta a apenas 14 segundos de Vlasov. Muy bien también ha estado Enric Mas, tercero de la etapa a 21 segundos.
Evenepoel llegó extenuado, a 41 segundos del ciclista ruso. Así las cosas, Vlasov se sitúa líder en la general, con una ventaja de 32 segundos sobre el belga, en principio, suficiente para llevarse la general final, aunque teniendo enfrente a Evenepoel nunca se sabe. Rodríguez es tercero en la general a 36 segundos y Mas, cuarto a 50. A 1:02, Alejandro Valverde, incombustible.
Mañana, en principio, etapa propicia para el sprint.
En el Saudi Tour, después de tres días sin demasiado interés y con serios problemas en la retransmisión televisiva de la prueba, hoy sí ha habido emoción y sí se ha podido seguir sin problema la cuarta etapa. El Quick Step, experto en forzar abanicos a poco que le acompañe el viento, destrozó la carrera y propició un corte en el que el equipo belga llevaba la voz cantante. El Bahrein del líder Buitrago y el UAE de Rui Costa empezaron entonces una persecución del grupo delantero, que mantuvo una ventaja superior al minuto hasta que llegó la cota decisiva del día. Bagioli, una de las baza del Quick Step, se fue hacia adelante en la cota y sólo le pudo seguir Van Gils, del Lotto-Soudal. El ciclista belga sacó de rueda al italiano y se quedó solo en cabeza. Fue el más fuerte y ganó la etapa, al tiempo que se situó líder en la general.
Mientras, en la Étoile de Bessèges, Benjamin Thomas, del Cofidis, ganó en solitario la tendera etapa y se puso líder de la general con siete segundos de ventaja sobre Alberto Bettiol.
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