Final soñado para la Vuelta femenina. La carrera, que ha ofrecido una semana de ciclismo de máximo nivel, ha terminado con emoción hasta el último metro y con una batalla épica en la ascensión de los Lagos de Covadonga, ascensión mítica de la prueba masculina y que hoy ha empezado a escribir su propia historia en la ronda femenina. Ha sido un final sensacional, portentoso, una oda al ciclismo protagonizada por Annemiek Van Vleuten, que ha logrado retener el maillot rojo de líder pese a las embestidas de sus rivales; Demi Vollering, que se ha quedado a apenas diez segundos de ganar la carrera, y Gaia Realini, que ha confirmado hoy que está entre las tres ciclistas más fuertes de la carrera y ha conseguido entrar en el podio final de la prueba.
Asturias tiene un largo idilio con la Vuelta masculina y hoy ha resultado escenario del duelo final de la Vuelta femenina, la batalla de Covadonga. Después de que Van Vleuten asaltara ayer el liderato y desbancara a Vollering, hoy el SD Workx ha intentado con todas sus fuerzas recuperar el maillot rojo. El movimiento que desencadenó el corte que dejó atrás a Vollering mientras la líder se había parado a hacer sus necesidades provocó cierta polémica. Hay una ley no escrita en el ciclismo que dice que no se debe atacar a la líder (ni a nadie) en situaciones así, pero el equipo Movistar sostiene que ya tenía planeado de antes atacar en ese punto de la carrera. En todo caso, así fue la historia, así ocurrió. Cada cual defiende su postura. No había retransmisión televisiva en aquel momento aún. La polémica tiene el recorrido que cada cual quiera darle.
Hoy, ya digo, el SD Workx ha intentado tomarse la revancha. Primero, infiltrando en una escapada peligrosa a Marlen Reusser. La suiza se fue hacia adelante con Kasia Niewiadoma. Reusser estaba algo más de dos minutos en la general, lo que obligó al Movistar a ponerse a tirar con fuerza del grupo para mantener la situación bajo control. Las dos fugadas llegaron a tener algo más de un minuto de ventaja, pero el equipo teléfono logró que llegara fuera a mayores.
Ya en las rampas de Lagos de Covadonga, Demi Vollering aceleró el ritmo y se fueron tras ella Muzic y Realini. Sufrió un poco Van Vleuten entonces. Logró llegar a su altura, pero no con facilidad. Más tarde, ya con Muzic descolgada y tras varios intentos de Realini, Van Vleuten no pudo seguir el ritmo. Empezó entonces esa batalla final de la Vuelta. Vollering apretaba todo lo que podía y más. Estaba la carrera en juego. Van Vleuten no se hundió. Claramente no era su mejor día, pero resistió, aguantó, mantuvo más o menos bajo control la situación. El cansancio se dejó sentir en la parte final y Van Vleuten entró en meta a 56 segundos de Vollering, lo que reducía su renta en la general a apenas nueve segundos sobre si compatriota del SD Workx y a 2:41 sobre Gaia Realini, que desbancó a Markus del podio.
Es en días así, en los que sufren y lo pasan mal pero logran resistir, en los que se agranda aún más la leyenda de las grandes ciclistas. Van Vleuten ha sabido sufrir para revalidar su título en la ronda española, que salda con un sobresaliente su novena edición, la primera en versión extendida y con fechas propias en el calendario. Hoy toca dar la enhorabuena y las gracias a los organizadores de la prueba y a las corredoras. Ha sido una Vuelta fantástica, con giros de guión y emoción hasta el final.
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